Los expertos advierten a las empresas sobre la importancia de poder conocer cómo están viviendo los trabajadores la pandemia, el nuevo escenario de trabajo y el regreso a la “nueva normalidad”, a través de encuestas personalizadas.
En el contexto laboral actual ampliamente transformado por los efectos de la pandemia mundial, estar cerca, conocer y escuchar de forma continuada a las personas que conforman los equipos de trabajo, así como comprender e interpretar la información y comprender la opinión de los miembros del equipo (Trabajadores/as) se hace imprescindible para su viabilidad.
Los departamentos de RRHH de las empresas están demandando soluciones para poder monitorizar el clima laboral de forma continuada, pero también para conocer qué sucede entre los miembros del equipo en períodos excepcionales como los que nos toca vivir.
Las soluciones que solventen esta demanda de los equipos, además de ser eficaces deben poseer unas características determinadas.
- Posibilidad de realizar encuestas abiertas y adaptadas a cada una de las situaciones sobrevenidas en el desarrollo de la actividad.
- Las preguntas deben poder personalizarse para poder segmentar los resultados de las mismas.
- El sistema tiene que ser perfectamente integrable con otros sistemas de gestión.
- La herramienta debe proporcionar la posibilidad, mediante rutas lógicas, de modificarse sobre la marcha para obtener las mejores respuestas.
El regreso a lo que se ha dado en conocer como “la nueva normalidad” lleva implícita una serie de características alejadas de “la antigua normalidad laboral”, En este ámbito nos interesa como empresa conocer cómo afectan estos cambios a los miembros de los equipos, de las plantillas de empleados/as. Se hace obvia la necesidad de establecer un sistema como el que proporcionan herramientas como Human Pull, por medio de la realización de encuestas personalizadas.
La contribución de los miembros del equipo es básica para el planteamiento y establecimiento de medidas organizativas, laborales o preventivas, entre otras, de cara a afrontar “la nueva normalidad”. Debemos conocer si nuestro equipo se siente protegido.
¿Cuáles son sus necesidades, sus inquietudes? Se debe poder detectar con el suficiente tiempo de antelación “los posibles focos de incendio” antes de que surja el fuego, para poder establecer los mecanismos preventivos necesarios o para decidir las acciones ante la nueva normalidad. Debemos ser plenamente conscientes de cómo perciben los miembros de los equipos la reacción de la empresa ante el nuevo contexto de pandemia, por coronavirus.
La solución.
En el nuevo contexto, ante “la nueva realidad” se hace necesaria una solución que permita pulsar, monitorizar y poner en valor la opinión, las respuestas a todas estas cuestiones, las relacionadas con la pandemia por el virus y otras influidas por la actualidad, social, laboral, etc. Una herramienta que lo haga de forma continuada pero también de forma puntual y personalizada, porque no todos los momentos son iguales.
En la actualidad, manuales, protocolos, medidas de protección, nuevos escenarios laborales, teletrabajo… Los cambios son variopintos e importantes, pero tienen un nexo común: los trabajadores/as cuya resiliencia y su aprendizaje durante los cambios, van a ser vitales a la hora de afrontar el nuevo panorama y debemos conocer su estado. Nuestra capacidad para aprender y evolucionar será un factor clave.
La Pandemia ha traído cambios para las personas. Pero también para las empresas. Los futuros inciertos se deben enfrentar y uno de los retos va a ser el de ser capaces de conocer fielmente lo que sucede con nuestros equipos.
El potencial de las personas se seguirá midiendo por sus capacidades académicas y su experiencia laboral, pero también por su capacidad para asumir los cambios sobrevenidos.
Atender la crisis sanitaria es prioritario, indudablemente. Pero se hace necesario cuidar a los equipos y equipar a las personas con las habilidades que necesitan, tanto para la conservación de las empresas, como para el propio desarrollo empresarial en la nueva e incipiente era laboral que nos está tocando vivir.